La RAE define el término "Procrastinar" como un verbo
transitivo, que significa diferir o aplazar. Desafortunadamente me considero un
campeón de dicha acción. Justo en este momento, aprovechando las vacaciones,
debería darle servicio al pequeño jardín de la casa, limpiar un
par de rejillas que ayudan a combatir las inundaciones que pueden generar las
lluvias de verano, las cuales al estar colocadas en la parte exterior sobre la
banqueta, se acumulan de basura y uno que otro objeto que los niños traviesos
introducen en su interior como parte de un juego que no termino de entender.
También debo colocar unos muebles de madera que van directamente sobre los
muros de la oficina que se ubica en la entrada de mi domicilio.
Pero aquí estoy, intentando recordar donde dejé el líquido antiplagas,
observando una de las rejillas y mirando directamente los muebles que me ven
con un dejo de súplica en la madera. Podrían pensar que son actividades que
pensé la noche anterior para el día de hoy... Pero la realidad es que las
planeé desde el viernes de la semana anterior.
Una vez más enfrente de la computadora, cambié el plan de actividades
hogareñas, para terminar de escribir los tres capítulos que debo agregar a la
novela en la que llevo tiempo trabajando. Evidentemente el plan no salió de acuerdo a lo establecido. ¿Qué ocurrió? ¡Soy un amante de las
historias de fantasía y ciencia ficción! Youtube lo sabe de sobra y tuvo a bien recomendarme
un vídeo en el que hablan de John Titor. Y como podrán sospechar viendo dicho video y otros más relacionados he aplazado por un tiempo esa actividad. ¿No conocen su historia? No se
preocupen, se las cuento a grosso modo.
Por allá en el año 2000, apareció en blogs de Internet, un usuario
llamado "TimeTraveler_0" decía ser un viajero en el tiempo del año
2036. ¿Su objetivo? Viajar al año 1975 para conseguir un procesador IBM 5100,
con el cual podrían corregir errores de código de un programa que crearía serios problemas en
los sistemas informáticos de aquel año, en su línea temporal.
Conforme fueron pasando las semanas, la actividad del usuario se volvió
más habitual, dando diversos datos sobre él y su tiempo. Dijo llamarse John
Titor, elegido para esta misión puesto que su abuelo paterno había formado
parte del equipo de trabajo que creo el procesador.
¿Por qué viajó al año 2000? Según él, por razones personales: tomar o
recoger (depende la versión de quien cuenta la historia y su traducción) unas
fotografías que se habían perdido durante la guerra civil estadounidense que
ocurrió en el año 2004. (De su línea temporal) La euforia en Internet fue
brutal, cientos de usuarios de estos portales, pedían más y más datos respecto
al futuro cercano. John no los desilusionó del todo.
Después de la guerra civil, EUA quedaría dividida en cinco territorios.
El viajero anunció una cruel noticia: La tercera guerra mundial daría
comienzo en el año 2015, Rusia llevaría a cabo ataques nucleares sobre ciudades
de Estados Unidos, Europa y China. El país norteamericano contraatacaría,
ganando la guerra. (Cual guión de Pearl Harbor) La curiosidad relevante: EUA
tendría en aquel momento, durante el curso de la guerra, un presidente de
color. (Algunos entusiastas han hecho referencia al ex-presidente Barack Obama,
dando esta predicción por medianamente acertada.)
En marzo de 2001 John realizó su última publicación. Desde entonces nada
se sabe de dicho viajero.
En sus publicaciones dejó una serie de explicaciones sobre los seis
elementos que necesita una máquina del tiempo para poder lograr su objetivo,
además agregó fotos de sus supuestos viajes y de los elementos que componían su
artefacto.
Por cierto, cabe mencionar que él realizó su viaje gracias a estos
elementos, los cuales fueron instalados en la parte trasera de un Corvette
1967.
Porque cuando viajas en el tiempo, debes hacerlo con estilo y buen gusto.
¿No?
Además de estas cuestiones, John Titor manifestó que la "paradoja
del abuelo" era imposible. Puesto que todo suceso o decisión cuántica, da
paso a otro "universo separado", por lo que sí John mataba a su
propio abuelo, su línea temporal o su propia existencia no se vería
afectada.
En fin, John Titor desapareció, pero dejó un legado de seguidores que lo
defienden como un personaje real. La primera vez que tuve noticias de este
viajero en el tiempo, fue en el año 2005 o 2006, en aquel entonces era un
fervoroso lector de la publicación mensual de la revista "Muy
Interesante", recuerdo que en aquel tiempo, a la edad de catorce o
quince años, los viajes en el tiempo se habían convertido para mí en una
obsesión, llegando a plantearme la posibilidad de estudiar física. Mi
sueño era viajar en el tiempo... Culpo en parte al autor J.J.Benitez y su obra
"Caballo de Troya"... (¿Quién no querría viajar al año 30 y
platicar con Jesucristo?) Además de "La maquina del tiempo" de H.G.
Wells y el cuento corto de Ray Bradbury "El
ruido de un trueno". (Estás dos últimas con adaptaciones al cine.)
Mis sueños se vieron frustrados en el tercer año de bachillerato después
de aprobar a los tumbos las materias de cálculo integral y calculo diferencial,
desde entonces abandoné el sueño de viajar en el tiempo; las matemáticas y yo
tenemos una relación de respeto mutuo. Distanciada.
Sin embargo, las ilusiones se mantienen. Descubrí que hay otra forma de
viajar en el tiempo: a través de la imaginación... Y no, no me voy a
aventar un rollo metafísico, del cual se bastante poco, o mejor dicho, nada.
Pero lo cierto, es que descubrí que se pueden crear mundos a través de
la observación. Soy un neófito sobre las teorías de viajes temporales, o bien
de las hipótesis de universos paralelos. Sin embargo, no puedo negar la existencia
de estos últimos, no de forma tangible obviamente, pero si de una manera
extrasensorial.
Me explico: sabemos que en la
realidad que vivimos no existen dragones, ni la magia propiamente dicha. Pero,
no podemos negar la existencia de esos "universos" a través de las historias de "Harry
Potter", "El señor de los anillos", "Canción
de hielo y fuego" con su adaptación en "Juego de
Tronos"; entre otras muchas más, con mención particular a los
multiversos de DC y Marvel. Gracias a la imaginación de grandes autores
de fantasía y ciencia ficción, podemos transportarnos a esos mundos, vibrar con
sus aventuras, amar, odiar o temer a los personajes. (De acuerdo... esto no tiene nada que ver con universos paralelos, volvamos al tema.)
En este orden de ideas, la "John Titor Foundation" (Sí,
existe una fundación.) publicó el libro "Jhon
Titor: A time traveler's tale" en el cual se discuten sus
mensajes. Me gustaría dar más detalles al respecto, pero desconozco el
contenido completo de la obra, la cual se encuentra disponible en Amazon, por
si alguien se interesa en saber más respecto al tema. Me he planteado la idea de comprarlo, siendo francos prefiero leer a Asimov; pero existen por lo menos dos cuestiones
que carcomen mi ansía de querer saber más respecto a John.
La primera, más allá de que no le atinó a ninguna de sus supuestas
predicciones (Nostradamus debe estar decepcionado) existe un detalle adicional
en sus relatos: él mismo aseguraba que al contar estos
sucesos, probablemente nuestra línea temporal se vería afectada y por ello, los eventos no
se desarrollarían de la misma manera, sino con algunos o muchos cambios... (Que
conveniente.) Lo cual aparentemente ocurrió si es que damos sus historias por
ciertas. ¿Por qué no me deja del todo satisfecho? Bueno... hay algo peor que un
spoiler... y es un mal spoiler. Ya no me siento parte de su historia, sino de una completamente diferente, una en la que los
viajes en el tiempo siguen siendo un tema de ficción... ¡Vaya decepción!
La segunda. Hasta donde sé (y alego a la ignorancia) no especifica cuáles
fueron las condiciones para su regreso a su línea temporal. Ojo, no soy ni
pretendo ser un experto en el tema, pero seguro que con el próximo
ejemplo absurdo podré explicarme de mejor manera.
Dragon Ball Z explotó el recurso de guión de los viajes en el tiempo. (Hasta el
momento, en dos ocasiones... ¡Alguien se está quedando sin ideas para su
historia! Porque cuando aplicas los viajes en el tiempo en una historia que no
va de ello... sin duda necesitabas una especie de Deus Ex Machina que te
salvara del apuro...) ¿Cuál
es el problema? Cuando Trunks le da la medicina a Gokú, se va para viajar al
momento en el que los androides hacen su aparición... y ¡oh! ¡Sorpresa! ¡No son
los mismos androides! Trunks, con su irrupción en el tiempo, cambió la
historia. Hasta este momento, punto para Titor.
Sin embargo una vez que Gohan derrota a Cell, Trunks vuelve al
futuro... A su línea temporal pero ¿Desde qué punto? Es decir... Él cambió
la línea temporal presente ¿si viaja al futuro no viajaría a ese futuro
que cambió y no al suyo? Entonces ¿No
debió viajar nuevamente al punto que creó ese cambio en la historia, en este
caso antes de darle la medicina a Gokú, para poder volver a su futuro sin que existan
anomalías? ¿Me explico?
Esto me pasa con John Titor, si viajo a su tiempo ¿Desde qué punto fue? ¿Desde la realidad
que pudo haber cambiado, es decir, nuestro
tiempo? o bien ¿Regresó al año 1975 antes de encontrar el procesador? Y lo más importante de todo ¿Para
afirmar la no existencia de la paradoja del abuelo mató a su propio abuelo sin
desaparecer? ¿Estuvimos frente a un viajero del tiempo homicida? Sí así ocurrió ¿Fue en nombre de la ciencia?
Su partida me deja muchas incógnitas inexplicables al respecto.
¿Tienes las mismas dudas que yo en este momento?
Bueno...
¡Bienvenido al mundo de la fantasía y la procrastinación!
Postdata: No sé ustedes, pero a pesar del hermoso diseño del Corvette 1967,
la nostalgia me indica que John, para hacer más creíble su historia, debió
haber viajado en un DeLorean.
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